El confinamiento puede provocar hasta siete millones de embarazos no deseados en el mundo. Esos son los temores de un informe desarrollado por las Naciones Unidas sobre los otros efectos de las crisis del coronavirus
Las dificultades en muchas regiones del mundo para acceder a mĂ©todos anticonceptivos disparan el riesgo de embarazos no deseados con las medidas de confinamiento de fondo. AdemĂ¡s, segĂºn los cĂ¡lculos del Fondo de PoblaciĂ³n de Naciones Unidas (UNFPA), un periodo de seis meses con confinamiento y dificultades para acceder a servicios de salud puede dejar a 47 millones de mujeres en paĂses de bajos y medios ingresos sin mĂ©todos de planificaciĂ³n familiar. Eso se traduce en una cifra alrededor de los siete millones de embarazos no deseados.
El informe de UNFPA advierte de un fuerte aumento de la violencia machista: 31 millones de casos adicionales consecuencia de las medidas de aislamiento. El confinamiento ha dejado a mujeres atrapadas con sus agresores y sin acceso a espacios seguro. La crisis puede retrasar programas contra la mutilaciĂ³n genital femenina. Para la OMS «la mutilaciĂ³n genital femenina es reconocida internacionalmente como una violaciĂ³n de los derechos humanos de las mujeres y niñas. Refleja una desigualdad entre los sexos muy arraigada, y constituye una forma extrema de discriminaciĂ³n de la mujer. Es practicada casi siempre en menores y constituye una violaciĂ³n de los derechos del niño. Asimismo, viola los derechos a la salud, la seguridad y la integridad fĂsica, el derecho a no ser sometido a torturas y tratos crueles, inhumanos o degradantes, y el derecho a la vida en los casos en que el procedimiento acaba produciendo la muerte».
Y el informe remata con otro aviso: el aumento del nĂºmero de matrimonios adolescentes por las dificultades econĂ³micas.