El Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez participó en la reunión nacional del Sistema de Tribunales Populares
La Habana, 8 feb.— El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, abogó este jueves en la reunión nacional del Sistema de Tribunales Populares por elevar la calidad de la actividad judicial y defender, ante todo, el ejercicio pleno de la justicia, de modo que la sociedad cubana mantenga su confianza en la actuación de estos órganos, porque esa ha sido siempre la vocación de la Revolución.
En el encuentro que durante dos días reunió a los presidentes de los tribunales provinciales, jueces, directivos del Tribunal Supremo Popular y jóvenes universitarios, Díaz-Canel se refirió al momento que vive la nación a las puertas del referendo del 24 de febrero para aprobar la nueva Constitución, que defiende la fórmula del Estado socialista de derecho y justicia social, a la par que amplía derechos y garantías a los cubanos.
Ponderó el papel del TSP en la elaboración –en el menor tiempo posible– de algunas de las normas legislativas que deberán derivarse de la Carta Magna, entre ellas el Código Penal, la Ley de Tribunales y la de Procedimiento Penal.
Entre otros temas relativos al trabajo de los tribunales populares, el mandatario consideró que la calidad de los juicios es definitoria. Hay que planificarlos bien, apuntó, prepararlos al detalle y ser puntuales en todos los aspectos, tenemos que aspirar a que los juicios queden con perfección y coherencia.
Se refirió, además, al estricto y oportuno cumplimiento de las sentencias que dictan los tribunales, porque de otra manera se pierde autoridad en la impartición de justicia; y defendió el importante rol que juega el juez de ejecución en la reinserción en nuestra sociedad de aquellos que han cumplido sanciones.
El Presidente comentó sobre varios asuntos que constituyen prioridades del Gobierno, entre ellos la política de cuadros, a la que hay que dar toda la prioridad que demanda y visualizar constantemente a quienes puedan desempeñarse como cuadros, mientras más jóvenes sean estos será mejor, acotó.
Al respecto, destacó el carácter emprendedor de los jóvenes cubanos, lo cual constituye una oportunidad para cada una de las instituciones.
Nadie pretenda desconocerlos, dijo, hay que orientarlos y conducirlos. He sentido en los últimos días mucha emoción, subrayó, de lo que están haciendo nuestros jóvenes, por ejemplo en la respuesta que han dado al tornado que azotó a La Habana. «Ahí hay calidad humana, revolucionaria y ciudadana, qué más vamos a pedir. Tenemos que propiciar que se puedan desarrollar, preparar, superar y aportar mucho más».
Instó a eliminar trabas y burocracias que entorpecen la gestión del Gobierno; a transparentar y hacer más visible todo lo que se realice; a informatizar procesos, tanto a lo interno de la institución como en su relación con la población; y ser sensibles ante los problemas del pueblo: «atender a la población es la mejor manera de respetar a la gente y aprender», subrayó.
Díaz-Canel reiteró cuestiones que constituyen hoy pilares del trabajo de los cuadros, como rendir cuentas a instancias superiores y también a la población; acudir a la investigación y la innovación para resolver los problemas; mantener estrecha relación con las instituciones científicas y las universidades; y hacer un uso permanente de la comunicación social.
Se trabaja por lograr una administración pública más eficiente, dijo el mandatario, quien se refirió luego a la batalla que se desarrolla en el país contra la corrupción y las ilegalidades, así como frente a fenómenos de adicciones, en particular la droga, por su impacto nocivo en nuestra sociedad.
En la reunión anual, el presidente del Tribunal Supremo Popular, Rubén Remigio Ferro, explicó los resultados de trabajo alcanzados en el 2018, que muestran indicadores de calidad superiores a periodos precedentes en aspectos como cantidad de casos resueltos y cumplimiento de sentencias. No obstante, reseñó, persisten deficiencias en la celebración de algunos actos judiciales, falta de profesionalidad, demoras en el comienzo de los juicios y decisiones desacertadas.
Remigio Ferro detalló aspectos relacionados con la plantilla del Sistema de Tribunales, la fluctuación en una parte del personal y la manera intencionada en que se gestiona la capacitación y formación de los jueces jóvenes y estudiantes de la carrera de Derecho, para vincularlos desde temprano con los tribunales de todo el país, experiencia que ha resultado de mucha motivación para los muchachos y para quienes los reciben. (Leticia Martínez Hernández)
