Caimanera, 25 nov.— En su misión por la justicia y la hermandad, y en franca expresión de respaldo a Cuba, la XXIX Caravana de Pastores por la Paz visitó las inmediaciones de la base naval estadounidense en la Bahía de Guantánamo y abogó allí por la devolución del territorio usurpado por ese enclave violatorio del derecho internacional.
Desde un muelle donde se divisa la ilegal instalación yanqui, los 26 activistas de siete países que conforman esta edición de la Caravana hicieron resonar un Viva Fidel, Viva Cuba y un grito unánime por el cese del bloqueo y el desmantelamiento de la base que cercena parte del municipio de Caimanera, escenario emblemático de reclamos cruciales contra políticas injerencistas.
Esta ha sido una de las ediciones más significativas en las que he tenido la oportunidad de participar, estamos una vez más inspirados para continuar luchando porque se le devuelva al pueblo cubano el área que es suya, dijo Gail Walker, al frente de la también conocida como Caravana de la Amistad Cuba-Estados Unidos, desde hace tres días en fructífera visita en Guantánamo.
Es la primera vez que venimos a esta localidad y el recibimiento tan cálido ha sido especial –subrayó- como valioso es compartir con el pueblo de Caimanera, conocer su historia, su vida diaria, idiosincrasia y batallar; y entender el hecho de que viven con un vecino hostil justamente en su traspatio hace que sea mucho más inspiradora nuestra labor de respaldo a Cuba en su causa justa.
Ayer llegamos a la Brigada de la Frontera y conocimos a los jóvenes que defienden a su patria ante la posibilidad de un ataque, y fue estimulante ver a gente tan joven dispuesta a continuar la obra de la Revolución y a luchar por ella, una generación que nació después del triunfo de 1959 pero que valora la importancia de mantener lo que esta obra socialista ha brindado al pueblo cubano.
En diálogo con la ACN también se refirió al significado inspirador de esta visita el Padre Luis Barrios Figueroa, puertorriqueño, el segundo al mando de la Caravana, Presidente de la Junta Directiva de Pastores por la Paz, y representante de la Iglesia Católica Anglicana de Nueva York, quien señaló:
“Ha sido sorprendente para nosotros, de inclinación de izquierda, ratificar in situ que Guantánamo no es la base, como muchos piensan, sino que aquí hay una comunidad, un pueblo que está en resistencia y vanguardia en todo momento y con una tremenda trinchera.
Nos volvemos a llevar de Cuba el compromiso con su Revolución, -dijo- y de buscar una manera para que cese toda la artimaña de intromisión de Washington en su intento de derrocar al gobierno revolucionario.
Sabemos que el trabajo de nosotros en ese sentido es importante, porque desde Estados Unidos podemos divulgar la verdadera realidad de esta Isla solidaria y pacífica. Estamos con ustedes, es una lucha gratificante como la de la boricua Isla de Vieques, es como una pelea contra Goliat donde al final el justo David vence, concluyó el Padre Barrios Figueroa.(Yaymara Villaverde Marcé)
