Ciego de Ávila, 22 oct.— Alrededor de 83 mil hectáreas que estaban ociosas en Ciego de Ávila, fueron entregadas a usufructuarios en los últimos ochos años y se encuentran en desarrollo para la producción de alimentos con perspectivas de aumentarlas.
Más de ocho mil 700 fincas se concedieron en ese período a personas naturales y jurídicas para su utilización en el ganado mayor y menor, cultivos varios, fruticultura, reforestación, granos y otros programas agropecuarios.
Los estimulados con esas posesiones agrarias en la provincia superaron de enero a septiembre en un cinco por ciento los acopios de nutrientes programados, aunque los volúmenes recolectados no satisfacen todas las necesidades, según informó el ingeniero Arturo Gómez Ramos, subdirector de la Delegación Territorial de la Agricultura.
El dirigente agregó que quienes más áreas adquirieron hasta la fecha son los interesados en la ganadería vacuna y ovino-caprina, mientras otros se inclinaron por la labranza de arroz, viandas, tabaco y caña de azúcar.
Precisó que todavía restan por adjudicarse alrededor de 90 mil hectáreas, las cuales son las más alejadas de las zonas urbanas y las que tienen mayores niveles de infestación de marabú y otras malezas.
Se han denegado más de 500 solicitudes y extinguidos cuatro mil 500 usufructuarios, una parte de ellos que habían sido aprobados por el Decreto Ley 300, indicó la fuente.
Funcionarios del sector cooperativo-campesino destacaron a la cooperativa de crédito y servicios Protesta de Baraguá, que aumentó su superficie y dispone de más de 60 toneladas de caña por hectárea, de 40 en la zafra pasada.
A Jóvenes licenciados del Servicio Militar Activo (SMA) se les han otorgado tierras en municipios avileños para aprovecharlas y aportar así alimentos agrícolas, con la ayuda de insumos por las delegaciones municipales del sector agrario.
La prioridad que tienen en ese sentido los soldados desmovilizados del SMA, está acreditada por los ministerios de la Agricultura y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, mediante el Decreto-Ley 300 y la Resolución 449/2013, decisión que también apoyan la Unión de Jóvenes Comunistas y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
Aproximadamente 10 mil hectáreas que estuvieron cubiertas por malezas en zonas de los cuatro centrales de Ciego de Ávila, se rescataron en solo cuatro años de labor, en su mayoría sembradas de caña por trabajadores de la rama azucarera y finqueros que solicitaron los suelos. (Julio Juan Leandro)