Skopje, 30 sep.— Más de un millón 800 ciudadanos con derecho al voto pueden asistir hoy a las urnas en Macedonia para ratificar o rechazar en referéndum el acuerdo firmado con Grecia en junio sobre el nuevo nombre del país.
De acuerdo con la Comisión Electoral Estatal (CEE) a las 11:00 hora local había acudido el 8,03 por ciento del millón 806 mil 366 inscritos en el padrón electoral a los tres mil 480 colegios en 80 municipalidades.
Tanto los órganos judiciales como las instituciones nacionales e internacionales a cargo del proceso de observación coincidieron en resaltar que la jornada transcurre en calma, sin incidentes ni reportes de irregularidades.
La consulta popular para ratificar el acuerdo con Atenas que pondría fin a casi tres décadas de litigio determinaría que en el futuro el país lleve el nombre de República de Macedonia del Norte (Republika Severna Makedonija), como convinieron los negociadores de las partes con mediación de la ONU.
Sin embargo en la pregunta a la que los electores deben responder Sí o No, esa nueva denominación ni siquiera se menciona.
‘¿Estaría usted por la membresía en la UE (Unión Europea) y la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) con la adopción del acuerdo sobre el nombre entre la República de Macedonia y Grecia?’, reza la formulación para el plebiscito.
Mientras el gobierno del primer ministro, Zoran Zaev, argumenta que ratificar el convenio significa abrir las puertas para el futuro avance del país, sus rivales políticos opinan que se trata de un documento lesivo para la identidad nacional y consideran la pregunta como un claro condicionamiento.
El propio presidente de Macedonia, Gjorge Ivanov, calificó el referéndum de una violación flagrante del derecho del país a la autodeterminación y denunció las presiones sobre la población de personalidades de la UE y de Estados Unidos para votar a favor, pues de lo contrario se cerraría el camino a la integración euroatlántica.
En su intervención en el debate general del 73 período ordinario de sesiones de la Asamblea General de la ONU reiteró que no acudirá a las urnas, fustigó todo tipo de condicionamientos a la voluntad popular y ante esa alta tribuna mundial confirmó la división en la cúpula de poder en su país.
El referéndum, empero, tiene un carácter solo consultivo, por lo que si triunfara el No, será el parlamento entonces quien asuma la responsabilidad de la ratificación del acuerdo con Grecia.
En cambio, si obtuviera la mayoría de los votos a favor, para lo cual basta sobrepasar el 50 por ciento de las boletas válidas, el rumbo de Macedonia para convertirse en el estado número 30 de la OTAN estará decidido, pues la carta de invitación esta lista y en espera de lo que suceda hoy y se iniciará el proceso para avanzar hacia la UE.
Para ofrecer esas alegadas oportunidades, desfilaron por una especie de pasarela pública en Skopje en las últimas semanas el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, los jefes de gobierno de Alemania y Austria, Angela Merkel y Sebastian Kurz; el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, entre otras figuras.
