Cuba, como ha demostrado durante más de seis décadas, seguirá poniendo siempre en primer lugar la vida, aseguró la víspera José Ángel Portal Miranda, ministro cubano de Salud Pública, a raíz de la aprobación por el Parlamento, este lunes, de la Ley del Presupuesto del Estado 2023.
En nota publicada en el sitio web del Ministerio de Salud Pública, Portal Miranda explicó que, con la máxima de mejorar la atención que se brinda al pueblo, el financiamiento para el próximo año se destinará a la adquisición de medicamentos, material gastable, reactivos e insumos no médicos, y a la reparación y el mantenimiento del equipamiento y el transporte sanitario.
Teniendo en cuenta las limitaciones del Presupuesto del Estado y la necesidad de disminuir el déficit fiscal, nuestro organismo ratifica que continuará trabajando para lograr una mayor racionalidad en el uso de los recursos financieros y materiales, disminuir los gastos y fortalecer la contabilidad, expresó.
El ministro precisó que los gastos del sector de la Salud Pública representan el 23 por ciento (%) del total de lo que se destina a la actividad presupuestaria en el país, y manifestó que con las cifras previstas se garantizan, entre otros elementos vitales del sector, la recuperación de niveles de actividad y programas priorizados.
Además, se respalda la continuidad de la formación y superación de nuestros profesionales y especialistas, así como el mejoramiento de las condiciones estructurales de instituciones, puntualizó.
Según trascendió este lunes en las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), que transcurre en el Palacio de Convenciones de La Habana, para la Salud Pública, Educación, Cultura, Deporte, Asistencia y Seguridad Social se destinan gastos por 251 mil 222 millones de pesos, superior en 16 mil 071 millones de pesos al estimado del presente año.
Meisi Bolaños Weiss, ministra de Finanzas y Precios, informó a los diputados que como parte del Presupuesto del Estado se dispondrán siete mil 164 millones de pesos a la financiación de los niveles de actividad, que incluye el incremento de los costos de los medicamentos, alimentos y la reparación y mantenimiento de servicios constructivos, entre otros.
