La Habana, 15 oct.— Presidentes y vicepresidentes de Comisiones Permanentes de Trabajo de la Asamblea Nacional, junto a funcionarios de las Oficinas Auxiliares y especialistas, intercambiaron este miércoles sobre desarrollo territorial.
Durante el encuentro, convocado a partir de un acuerdo adoptado por la Comisión de Asuntos Económicos, se dieron a conocer las características del proyecto de investigación titulado ¨Fortalecimiento de las capacidades prospectivas para la planificación del desarrollo territorial en Cuba¨.
El estudio fue presentado por los doctores en Ciencias Lydia María Garrigó Andreu, profesora titular de la Escuela Superior de Cuadros del Partido y del Gobierno; y Francisco Borrás Atienzas, profesor titular de la Universidad de La Habana y vicepresidente de actividades Científicas de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores.
Según explicaron, este proyecto tiene el propósito de contribuir al desarrollo territorial sostenible, con herramientas de prospectiva estratégica que permitan involucrar las perspectivas y necesidades de los diferentes actores económicos y sociales en el momento de la formulación e implementación de políticas públicas.¨ A juicio de los autores, esta investigación, centrada en el municipio de Camagüey, constituye un aporte significativo a la planificación para el desarrollo local sostenible de ese territorio hasta el año 2030, destacando cuáles son los problemas fundamentales y las oportunidades, asuntos en los que hay que centrar mayor atención para lograr el cumplimiento de los objetivos estratégicos del país.
Expusieron, además, que se ha alcanzado un significativo impacto económico-social, cultural y ambiental en el municipio, dada su autonomía en cuanto a la gestión y el empleo de las potencialidades, ¨sobre la base de la participación activa, comprometida e integrada de los actores, con la finalidad de avanzar hacia la prosperidad individual y colectiva, pensando y actuando como país¨, indicaron.
Entre los elementos clave que contribuyen al desarrollo local, según los especialistas, se encuentran la disponibilidad de recursos presupuestarios, financieros y materiales, la autonomía y calidad de la gestión de los gobiernos locales, la innovación y el desarrollo tecnológico, los encadenamientos productivos, el desarrollo y la informatización de la sociedad, y la capacidad para producciones agropecuarias y alimenticias, entre otros.
