Santiago de Cuba, 9 oct.— Aunque Santiago de Cuba muestra control de la COVID-19, las autoridades gubernamentales y sanitarias del territorio reordenan el sistema de aislamiento ante la posible aparición de casos positivos a la enfermedad.
Según informara a la prensa Luis Manet Lahera, director de Higiene y Epidemiología en la provincia, en el hospital de campaña de Veguitas ubicado en la carretera de El Caney, se atenderán a los contactos de pacientes confirmados, excepto los lactantes y personas con comorbilidades, quienes irán a la escuela pedagógica Floro Pérez, junto a las embarazadas y niños menores de dos años.
El galeno subrayó la obligatoriedad del ingreso domiciliario a todos los viajeros nacionales provenientes de zonas sin circulación del virus SARS-Cov-2, para vigilancia epidemiológica durante 10 días por el médico y enfermera de la familia.
También puntualizó el establecimiento de centros de aislamiento en los municipios de Contramaestre, Mella y Songo-La Maya, puntos de acceso principales al territorio, para los viajantes procedentes de áreas con transmisión del nuevo coronavirus y sin la realización de PCR, quienes recibirán el alta médica luego de las 72 horas y con una prueba de laboratorio negativa.
Asimismo, indicó el cuidado estricto por la atención primaria a los sectores vulnerables: postrados, discapacitados físicos y otras situaciones especiales, requeridas de seguimiento epidemiológico y con autorización de los directores municipales del ramo.
De un momento a otro arribarán por el aeropuerto Antonio Maceo, de esta ciudad, colaboradores de la salud en misiones internacionales, y para su cuarentena se habilitó la Facultad Idiomática de la Universidad de Ciencias Médicas santiaguera, otrora Escuela de Trabajadores Sociales.
Cada policlínico tiene la responsabilidad de vigilar en su domicilio a cualquier ciudadano con PCR negativo y proveniente de cualquier provincia del país, concluyó Manet Lahera.
Pese al comportamiento favorable de la COVID-19 en Santiago de Cuba, al no reportar casos autóctonos desde abril, el sistema de salud se mantiene alerta y busca alternativas para la hospitalización del ciento por ciento de los afectados en caso de un rebrote de la patología. (Beatriz Vaillant Rodríguez)