Contramaestre, Santiago de Cuba 15 sep.— En el municipio santiaguero de Contramaestre una veintena de estructuras campesinas han recibido los beneficios del Proyecto de Desarrollo Rural Cooperativo. En ese territorio oriental de Cuba comienzan a dar frutos las inversiones de esta iniciativa de colaboración internacional que desde hace varios años tiene el propósito de contribuir con el desarrollo del sector campesino, aprovechando la máximo las potencialidades de la ciencia y la técnica, así como los recursos naturales que emanan de la tierra.
Elevar las producciones de granos como el maíz y humanizar el trabajo en el campo, es tarea de primer orden del estado cubano y con el fin de incentivar este resultado, 24 formas productivas entre Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) de este territorio del centro sur del oriente cubano, han sido beneficiadas con el Proyecto de Desarrollo Rural Coopertivo conocido como PRODECOR.
Arianna Romero Quesada, Presidenta de la CCS José Martí enclavada en el polo productivo más importante de la región, Laguna Blanca, explica que los beneficios del proyecto se han extendido a la comunidad porque desde el productor hasta la familia han experimentado una notable mejoría con la obtención de mayores producciones y el uso de equipamiento que hace más cómoda la actividad en el campo.
Edilson Mendoza Moreno, cooperativista de la antes mencionada estructura contramaestrence, destaca que a través del Proyecto de Desarrollo Rural Coopertivo han recibido maquinarias y equipamientos como tractores, cosechadoras, desgranadoras, arados integrales, así como sistemas de riego y determinadores de humedad entre otros. Todo ello ha revolucionado el trabajo que anteriormente casi en su totalidad se realizaba manual.
El desarrollo del campo sobre la base de la ciencia y la técnica es una máxima que PRODECOR impulsa entre los agrícolas de Contramaestre y ya da sus frutos.