La Habana, 7 oct.— Cuba rindió homenaje a las víctimas del criminal sabotaje a un avión de Cubana de Aviación, que el 6 de octubre de 1976 arrebató la vida a los 73 pasajeros que venían a bordo.
Autoridades, familiares y una representación del pueblo cubano marcharon este domingo en peregrinación en la capitalina Necrópolis Cristóbal Colón para rendir tributo, en el panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, a los desaparecidos.
Los participantes, que enarbolaron consignas de condena al vandálico hecho, colocaron flores en homenaje a los que perdieron la vida en el atentado.
Este crimen fue eslabón de una cadena de odio perpretada por terroristas, recordó Eliezer Romero, Capitán de Cubana de Aviación.
Romero retomó las palabras dichas por el canciller Bruno Rodríguez hace unos días en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde destacó la fuerza combativa del pueblo cubano.
A lo largo de la historia de esta Revolución que siembra y construye, el pueblo de Cuba se ha visto afectado por gobiernos norteamericanos que no escatiman presupuestos para cobijar el terrorismo a sueldo, que ha cobrado miles de víctimas en su obcecado afán de destruir nuestra patria, afirma este domingo Juventud Rebelde.
Eso fue lo que hicieron sus serviles secuaces el 6 de octubre de 1976, cuando en pleno vuelo sabotearon un avión de Cubana y les arrebataron la vida a los 73 pasajeros que venían a bordo. La historia recordará siempre este suceso como uno de los más crueles crímenes de lesa humanidad, subraya el diario de la juventud cubana.
Pero como nos enseñó Fidel aquel día en la Plaza, cuando una multitud despidió a sus mártires: «Nuestra fuerza es, en fin, la fuerza del patriotismo y la fuerza del internacionalismo. Las ideas por las que luchamos son estandarte de los hombres más honestos y dignos del mundo de hoy y el emblema seguro y victorioso del mundo de mañana», proclama Juventud rebelde. (Laura Alonso Hernández)