Washington, 1 ago.— El presidente estadounidense, Donald Trump, quien recibió muchas críticas anoche en el debate demócrata, acusó a su predecesor, Barack Obama (2009-2017), de ser responsable de las separaciones de familias migrantes realizadas por su propio Gobierno.
Los aspirantes del partido azul a la Casa Blanca estadounidense que participaron en la segunda noche de discusiones en Detroit, Michigan, condenaron en varias ocasiones las controvertidas medidas del actual jefe de Estado en materia migratoria y las condiciones de detención en los límites con México.
En un momento del debate el senador Michael Bennet expresó que los niños deben estar en salones de clases, no en jaulas; mientras su colega en la Cámara Alta Cory Booker señaló que en los centros fronterizos hay menores que duermen en el pavimento y personas enjauladas.
‘Las jaulas para niños fueron construidas por la administración de Obama en 2014. Él tenía la política de separación de niños. ¡Yo le puse fin, incluso cuando me di cuenta de que más familias vendrían a la frontera!’, escribió Trump en Twitter durante el evento.
De acuerdo con la televisora NBC News, si bien es cierto que el ejecutivo previo construyó algunos de los centros de detención de migrantes, incluido uno en 2014, los cuales han alojado a niños durante ambas administraciones, Trump está equivocando acerca de la política de su predecesor.
El gobierno de Obama no tenía una práctica generalizada de separación familiar, aunque las familias fueron detenidas juntas, indicó el medio.
Además, la cadena recordó que Trump solo puso fin a la separación de familias en medio de la indignación que provocó esa medida dentro y fuera del país, y ante las demandas interpuestas en los tribunales.
De acuerdo con el portal digital FactCheck.org, un proyecto que evalúa y refuta lo que considera afirmaciones inexactas, engañosas o falsas hechas por políticos, los gobiernos anteriores no tenían una política general para procesar a los padres que cruzaban ilegalmente la frontera y separarlos de sus hijos.
La administración Trump anunció en abril de 2018 la política de ‘tolerancia cero’, con el fin de que todas las personas que ingresaran de forma irregular a Estados Unidos fueran remitidas para enjuiciamiento penal.
Fue a partir de ese momento los niños migrantes comenzaron a ser retirados del lado de sus progenitores.
Tras las fuertes condenas generadas por esa medida, el mandatario firmó una orden ejecutiva para poner fin a las separaciones familiares.
Sin embargo, la Unión Estadounidense de Libertades Civiles afirmó en una presentación judicial esta semana que más de 900 niños han sido separados de sus padres después de que supuestamente fue detenida la práctica.
