Naciones Unidas, 9 jul.— El Consejo de Seguridad de ONU celebra hoy una sesión abierta sobre los vínculos entre el terrorismo internacional y el crimen organizado, y se espera que lo debatido aquí sirva para elaborar un proyecto de resolución.
Según indicó la delegación de Perú, que este mes preside el órgano de 15 miembros y es el promotor del borrador, la idea es escuchar diferentes perspectivas antes de finalizar el texto que será sometido a votación a finales de julio.
El director ejecutivo de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), Yuri Fedotov, y la directora ejecutiva del Comité contra el Terrorismo, Michele Coninsx, figuran entre quieres ofrecerán informes en esta sesión.
Como parte de su trabajo en el Consejo, durante el año anterior y el actual, Perú se ha centrado en abordar la conexión entre el crimen organizado y el terrorismo.
Además, el embajador peruano en ONU, Gustavo Meza-Cuadra, presidente del Comité contra el Terrorismo, establecido en la resolución 1373 de 2001.
Durante su presidencia anterior, el 9 de abril de 2018 Perú organizó una reunión bajo la fórmula Arria (la cual permite la participación de diversos actores internacionales) sobre cómo mejorar las sinergias entre Naciones Unidas y las organizaciones regionales y subregionales para abordar el nexo entre el terrorismo y la delincuencia organizada transnacional.
Este 2019, el Consejo de Seguridad y sus órganos subsidiarios continúan explorando los vínculos entre el terrorismo internacional y el crimen organizado.
De hecho, el pasado 28 de marzo se adoptó la resolución 2462, centrada en la financiación del terrorismo y que enfatiza en coordinar los esfuerzos a todos los niveles para responder a los desafíos del extremismo violento y la delincuencia organizada, de conformidad con el derecho internacional.
Ese texto fue adoptado en un debate abierto sobre ‘Prevención y lucha contra la financiación del terrorismo’.
Ahora se espera que en la reunión de este martes se sigan explorando las formas de fortalecer la cooperación entre los gobiernos, la ONU y las organizaciones regionales y subregionales para abordar los vínculos entre los crímenes organizados y el terrorismo internacional.
