Santiago de Cuba, 4 ene.— En la biblioteca central de la Universidad de Oriente (UO), donde hace 60 años quedó constituido el gobierno provisional revolucionario, fue rememorado ese acontecimiento histórico que siguió a la proclamación del triunfo insurreccional dos días antes.
En sus palabras, la rectora de esa institución docente, doctora Diana Sedal, resaltó el significado del hecho, que enorgullece a la comunidad universitaria santiaguera, y agradeció al doctor Reinaldo Suárez, profesor de la UO, por el libro que lo refleja, con los testimonios del doctor Luis M. Buch.
Suárez, miembro de la Academia Cubana de Historia, es el autor de Gobierno Revolucionario Cubano, Primeros Pasos, realizado a partir de los testimonios de quien fuera ministro de la Presidencia y secretario del Consejo de Ministros desde enero de 1959 hasta marzo de 1962.
Al intervenir en el acto de recordación, el jurista e historiador puntualizó que a la biblioteca universitaria Francisco Martínez Anaya corresponde el honor de ser la primera de las tres sedes que ha tenido el Gobierno Revolucionario, ubicado posteriormente en los Palacios Presidencial y de la Revolución.
Explicó que no se trató solo de la constitución de la máxima autoridad de la nación, sino también de su funcionamiento allí hasta el día 5 de enero, con toda la trascendencia que implicó en las decisiones de los primeros momentos que siguieron a la proclamación del triunfo insurreccional el primer día de 1959.
El nombramiento de Fidel Castro como jefe de las fuerzas de tierra, mar y aire de la República fue uno de los hitos de esa circunstancia, que oficializó la jerarquía del líder del Ejército Rebelde y el Movimiento 26 de Julio sobre los mandos castrenses del país.
Otro de los saldos de esas jornadas gloriosas fue el nombramiento como edecán presidencial tras su ascenso a capitán del segundo teniente Pedro Sarría Tartabull, el honorable militar que salvó la vida de Fidel Castro cuando fue detenido después del asalto al Cuartel Moncada el 26 de julio de 1953.
En el texto a cuatro manos sobresale el valor de lo contado por Buch y el cotejo minucioso y profundo en diversas fuentes históricas que lo convierten en consulta obligada para acercarse a los inicios de la Revolución en el poder.
